En 1991 les pedí a mis amigos que me regalaran el CD ¡qué herejía el CD! de Weld. Era un disco de Neil Young con Crazy Horse en el que el artista canadiense tenía muy claro lo que quería: ruido, furia y rabia. Después de aquel disco estuve siguiendo mucho a Neil Young, disfrutándolo en YouTube, leyendo libros, comprando más CDs y viéndolo envejecer con dignidad sacando proyectos un poco raros y otros fantásticos como neilyoungarchives. En esta página se pueden ver, por ejemplo, las composiciones originales escritas por Neil Young.
Hace unos meses Neil Young lanzó Barn con Crazy Horse aunque ya no están todos los que fueron. Aquí están Billy Talbot, Ralph Molina y Nils Lofgren, se ha perdido Frank Sampedro por el camino por lo que sea. El álbum Barn está grabado en un granero (barn) reconstruido en las montañas de Colorado. En la portada se pueden ver los detalles: amplitud, tranquilidad, emoción y comodidad. Probablemente lo que más se busca a una edad avanzada.

El álbum Barn es muy suave y tranquilo excepto en un par de canciones donde se vienen un poco arriba y se hacen eléctricos y rabiosos. Es el primer LP que me compro de Neil Young en general y con Crazy Horse en particular. En el futuro espero recuperar Weld u otros que Neil Young ha ido publicando. También se encuentran en las tiendas muchas grabaciones tomadas de la radio o de conciertos y a alguno habrá que darle una oportunidad.
Lo que se nota en el disco es que los cuatro artistas se lo pasan muy bien tocando juntos. Que, probablemente haya pocos arreglos adicionales o mezclas posteriores y que, como los Beatles, se atreven con tomas largas y continuadas.

Las canciones ofrecen la armónica de Neil Young, el acordeón de Nils Lofgren. También hay estridencias con las guitarras y como siempre magníficos ritmos con la batería de Ralph Molina. Hay canciones en las que Neil Young se pone reivindicativo y, bueno, después de haberlo hecho durante tantos años, le escuchas con una sonrisa. También la tranquilidad, hemos dejado de galopar por la pradera como un caballo loco a pasear juntos de la mano en escenarios amplios con altas hierbas y sol de atardecer. No pasa nada, todo se disfruta.
Barn incluye diez canciones que se reparten en cuarenta y tres minutos que saben a poco. Esperemos que haya más discos de Neil Young y Crazy Horse y esperamos poder contarlo.
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