Coque Malla se atreve con ‘Mujeres’ en disco y en película

El documental ‘Mujeres’ de Coque Malla presenta a un compositor de canciones en busca de voces con las que conseguir una nueva visión de la canción. Y lo consigue en muchas de ellas en las que la mujer que canta y participa hace suya la canción. Además la película es un complemento al disco en el que, con todos los arreglos adecuados, ofrece un resultado final más completo aunque menos fresco y espontáneo que la película.

Y es que Coque Malla tiene habilidad para aprender de las mujeres. Se le nota que su madre le enseñó a aprender a conocerlas aunque mantiene fuertes barreras cuando las mujeres intentan liderar la conversación o cuando le demandan más información, por ejemplo, del significado de las canciones o de su deseo por trabajar con mujeres. ‘¡Yo no lo haría nunca!’, le dice Jeanette.

También Coque muestra su sorpresa cuando descubre que sus canciones, aparentemente crípticas, son descifradas fácilmente por las mujeres. La variedad de las mujeres que participan es enorme y cada una tiene una personalidad muy diferente. También son artistas de varias épocas aunque todas tienen en común que cuentan mucho más de ellas en los cinco minutos que intervienen en el documental que Coque durante toda la película.

Hay muy buenas colaboraciones y mujeres que se vuelcan en el proyecto ofreciéndose agradecidas y participativas. Probablemente con hombres el proyecto sería mucho más difícil o el resultado no sería tan variado y diverso.

Me llamaron mucho la atención, en la primera visualización, la fuerza de Jeanette y su dominio absoluto de la industria musical, la facilidad para mezclarse con la canción de Vilma (y Los Señores) y sobre todo la voz aterciopelada y gastada por un buen uso, de Rebeca Jiménez. En mi opinión la mejor de las mujeres y la que mejor se desenvuelve en el proyecto: conocer la canción, entenderla, sentirla, cantarla y compartirla con la audiencia.

Cuando Ángela Molina le pide a Coque que le explique lo que significa la canción para ayudarle a interpretarla, a cantarla, a expresarla ¡y cómo lo hace! a Coque se le hace complicado comunicar el significado aunque le habla y le cuenta detalles lo que le sirve a Ángela Molina para conseguir construir una narrativa.

Creo que las canciones no significan nada, o al menos significan lo que cada uno quiere. No dejan de ser un recurso artístico que utiliza el autor para expresar sus sentimientos, para tocar la guitarra y para irse de gira con los amigos. Vivir en la música demanda escribir, componer y cantar canciones. Los artistas saben cuándo su trabajo es sincero, cómo se hace para compartir y qué hay que ofrecer para generar emociones en los demás.

Eso es lo que creo que más le gusta a Coque Malla, cantar con amigos, pasárselo bien y si además nos lo pasamos bien los demás mucho mejor. Ya lo habíamos confirmado después de saber que le gustan los musicales y que en el escenario se convierte en un Gene Kelly ¡gotta dance!

A Coque le sale la vena de la música que ha oído y me extraña que no haya decidido escaparse fuera de España. Se anima a mezclar estilos y a probar y a experimentar. El resultado es muy bueno y el documental es un ejemplo de que se pueden construir productos muy atractivos y que abren puertas para seguir evolucionando y descubriendo.

La colaboración entre artistas en España será una de las formas de supervivencia, lejos de ser una referencia única y solitaria, el mercado demanda colaboraciones y mezclas de estilos. Hace muchos años que Coque Malla lo sabe, además sabe hacerlo y por eso trabaja para seguir trabajándolo y hacerlo estable. No hay opción a dar ningún cabezazo y todas las mujeres están estupendas con Coque Malla dejándoles hacer y expresarse con total libertad.

Éste es el vídeo promocional de Mujeres que se puede encontrar por las plataformas habituales de contenidos: