Me gusta la película de When the game stands tall, que se podría traducir como cuando el juego perdura. La película, que dura dos horas, cuenta la historia real de Bob Ladouceur interpretado por Jim Caviezel, el entrenador de fútbol de los espartanos de De La Salle High School, el bachillerato español, y de su asistente Terry Eidson. Y es que desde que ambos tomaron la dirección del equipo consiguieron 151 triunfos consecutivos desde el año 1992 hasta el 2003 y rompieron todos los récords de victorias consecutivas en cualquier deporte. La película se estrenó en Estados Unidos en agosto del 2014 y se puede descargar en plataformas.
En la película, apta para todo el mundo y sean deportistas o no, se muestran los valores que aporta el deporte aunque además se presentan puntos críticos de la etapa de la vida del paso a la juventud. Así se puede ver cómo los nervios por mantener esa racha de triunfos afectaron al entrenador, cómo los jugadores más destacados fueron a la Universidad para seguir triunfando y poder acercarse a la liga profesional y sobre todo se ve qué pasó cuando la racha terminó. Además hay muchas escenas del duro, durísimo entrenamiento, con herramientas estupendas y también imágenes de los partidos con choques, carreras y lanzamientos espectaculares.
Aunque ya he contado bastante de la película, el final es épico y emocionante al enfrentarse los espartanos de De la Salle a su gran rival y aún sube más la tensión cuando en los créditos finales se puede ver al entrenador real Bob Ladouceur en discursos originales hablándole a sus jugadores. Me encanta lo que les enseña, básicamente que crezcan como jugadores y que piensen en el equipo. Además, les dice, lo que aprendan a esa edad les servirá para tener una vida completa y satisfactoria y que el fútbol les ayudará a convertirse en personas que se podrán integrar fácilmente en la sociedad.
Aquí se puede ver el tráiler aunque los cortes elegidos distraen un poco del objetivo real de la película que, creo, es mostrar cómo la educación en el bachillerato con buenos mentores enseña a los estudiantes a convertirse en mejores personas y a estar preparadas para el futuro. La actriz Laura Dern interpreta a Lev Ladoucer y tiene muy claro que el trabajo de su marido es acompañar a los niños y adolescentes a hacerse mayores y a madurar de la mejor forma posible.
Además, y lo dejo para el final, en la película aparece el actor Clancy Brown interpretando a Mickey Ryan, el padre del mejor jugador y capitán del equipo, que enseña lo peligrosos y la mala influencia que pueden tener los padres en el trabajo de los jugadores. Y es que sus arengas fuera de lugar y su presión descontrolada sobre su hijo no son nada buenas para el rendimiento del equipo y de los jugadores. Me gusta mucho la directriz del entrenador que dice que él no habla con los padres.
La película no permite dar ningún cabezazo y es para todos los públicos. Los jóvenes y adolescentes son los que más la pueden disfrutar porque se verán reflejados en las actitudes y comportamientos de los valientes jugadores. Son películas excelentes para ver con amigos y experimentar luego las sensaciones en la pandilla, en el equipo o en el grupo de amigos.
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