En el año 1972 se hacía un cine muy libre buscando nuevas formas de contar historias y nuevas historias que contar. A Roman Polanski le gustó lo del absurdo y construyó ¿Qué? (What?) con un reparto estelar, una ambientación ideal y una historia que te engancha. La calidad de la película, en Amazon Prime Video, es horrible aunque se puede ver y disfrutar entera.
La película empieza que parece Los violadores del amanecer, los años setenta eran duros en toda Europa, y a la pobre Nancy, interpretada por Sydne Rome, que es una joven americana liberal, atrevida y valiente, la quieren violar. De repente escapa a través de un teleférico (!) y aterriza en una peculiar y lujosa mansión que pertenece a Joseph Noblart, interpretado por Hugh Griffith. Se trata de un anciano que domina la casa con puño férreo aunque vive gente tan rara y dispar ¿¡son familiares y amigos!? que es todo absurdo. Así que Nancy se aloja en una habitación estupenda y empiezan a pasar cosas. La película es un continuo despropósito, no sé si luego Scorsese la utilizaría para aquella película ¡Jo, qué noche! trece años después. Y es que todo parecen ideas que van pasando, intercambiando, mejorando y amplificando los directores y artistas y adaptadas a los tiempos que corren. En la actualidad, con el despropósito político que nos toca vivir, se echan de menos directores valientes que ridiculicen la situación actual. Y es que la Ley Miró empezó a dejarlo todo fatal y no hemos parado.
Me gusta Sydne Rome porque lleva el peso de la película. Dicen que es una especie de Alicia en el País de las maravillas y que se va tropezando con personajes cada vez más descacharrantes. El de Mastroianni está siempre deseando tomar el té con ella y su personalidad, con las gafas ¡ahora con cristal ahora sin él!, con el vestuario ¡un albornoz o una piel de tigre para ser objetivo del látigo! demuestra que es un actor costumbrista con una facilidad al alcance de muy pocos. En España tenemos a José Luis López Vázquez como ejemplo de naturalidad, credibilidad y capacidad de sacar adelante una película con gestos y talento.
A Marcelo Mastroianni le da la réplica en alguna escena el mismo Román Polanski aunque claro éste se tuvo que poner un bigotazo para poder destacar y no quedar demasiado mal ante este portento de actor.
Otros personajes secundarios son un poco aburridos y todo vuelve a cambiar con la llegada del abuelo, que parece el patriarca, y que decide, morir feliz observando la anatomía de la joven Sydne Rome, tenía poco más de veinte años cuando interpretó a la joven osada y atrevida que es seducida inmediatamente por Alex, el maduro ¿proxeneta? interpretado por Marcelo Mastroianni. Ver a Mastroianni vestido de Napoleón en la playa no tiene precio.
El pijama de Sydne Rome, sólo la chaqueta, la pierna azul, la pérdida de la ropa constante, la relación con Mastroianni ¡sin tomar el té! y la locura con repetición de situaciones ¡pisando la pelota de ping-pong.! son los activos de ¿Qué? y hacen que no puedas dar un cabezazo. El final está integrado con la película y ya parece que a Roman Polanski le importaba poco cómo terminase la película, el absurdo lo impregna todo así que el final también está fenomenal.
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