Sylvia es una trabajadora social a la que le cuesta mucho olvidar su pasado. Tiene grandes cicatrices y al menor problema todo se rompe y se quiebra. Su memoria le traiciona porque además de no olvidar le provoca ideas confusas generando dudas a su alrededor. Y luego está Saul que es un ricachón que tiene vacíos en su memoria y que siente una atracción total hacia Sylvia desde que compartieron clases en el colegio aunque él no lo recuerda. Los dos se encuentran de forma casual y las miradas iniciales de curiosidad e ingenuidad de Saul hacia Sylvia se van convirtiendo en algo mucho más fuerte y apasionado que, además, es correspondido.
Durante ese proceso los dos tendrán que intentar entender lo que les pasa. Ella quiere olvidar y no lo consigue, su familia y su adicción además de su historia, que es demasiado pesada para deshacerse de ella. Y Saul no consigue encontrar su camino y no recuerda ni lo que le pasa, aunque sabe que Sylvia es su amor. Al unirse la relación se hace muy fuerte e intensa generando mucha expectación a su alrededor. Aunque ellos son muy felices.
Memory se presentó en el Festival Internacional de cine de San Sebastián del año 2023. Está dirigida por el mejicano Michel Franco que ha dado el salto a América, está rodada en Nueva York, y se nota que le han dado muchos medios. La anterior película, no comentada en Elepés y Pelis, es Nuevo orden, un relato comunista del que, afortunadamente, parece alejarse y darle más relevancia a los personajes, a sus dudas, temores y fragilidades. Me gusta más esta visión.
La película tiene dos actores muy potentes: Jessica Chastain y Peter Sarsgaard. Los dos realizan una gran interpretación con contenido aparentemente vacío y aburrido y que sin embargo, viéndolos en la pantalla les permite dar rienda suelta a su trabajo.
Especialmente destaca Peter Sarsgaard por su tremenda fragilidad. Te dan ganas de achucharlo y llevártelo a curarlo donde quiera que se curen estas enfermedades. Y con Jessica Chastain se complementa estupendamente porque se dejan el espacio y ganan cuando están los dos juntos.
No hay momento para el cabezazo aunque hay espectadores que se pueden aburrir viendo que no pasa nada. Y sí que pasa, todos los personajes son muy importantes y el guion les deja tener mucha relevancia y son fundamentales en el amor de Saul y Sylvia.
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