‘La hija de todas las rabias’ o el viaje de María creciendo en identidad

La hija de todas las rabias o el viaje de María, es el primer largometraje de la nicaragüense Laura Baumeister cuya película se presentó en el Festival de Toronto y fue ganadora de varios premios de cine iberoamericano. La película presenta la vida de María, una niña que vive en la marginalidad más extrema en el basurero municipal de Managua de la actual Nicaragua.

La niña pasa sus días en medio de una gran fantasía ya que a través de la basura consigue hacer desarrollar su imaginación en un ejercicio de encontrar la belleza y lo lúdico, como ha buscado conseguir la directora,quien por circunstancias, conocía el basurero por trabajos que hizo allí en su época de estudiante.

Con unos atardeceres hermosos que realzan el paisaje, cercano al mar y a un lago que está junto al vertedero, y a fenómenos naturales como el viento, el sol y la lluvia, y otros no tanto como el fuego y esa inmensa suciedad que no cesa en toda la cinta, la película va presentando las dificultades diarias que encuentra María para sobrevivir junto a su madre. Ésta, en un baile grácil de mujer pantera lleno de manejo corporal por parte de la actriz Virginia Sevilla, le enseña a María a sobrevivir, un sueño que se hará recurrente en su agitada vida.

La estirpe de perros que María cuidaba con deleite iban a ayudar a que María y Lilibeth comieran por una temporada pero nada hacía presagiar que no podrían devolverle al favor al pandillero.
En ese momento la película es un canto desesperado por parte de María de once años buscando a su madre y, gracias a Tadeo, el niño que conoce en el centro de reciclaje enfermo por el mercurio con el que trabaja a diario, María se lanzará a la aventura de sobrevivir haciendo un ejercicio sin ella saberlo de búsqueda de identidad y de conocer sus propios límites.

Abandonada en un centro de reciclaje, la directora nos acerca al trabajo infantil, a la orfandad por parte de unos progenitores que o bien, llevados por la mortandad, o por el sufrimiento de abandonarles, les acogen en ese centro de trabajo a cambio de explotarles para conseguir pagar a los empresarios que se dedican a la apisonadora de los residuos.

La ópera prima de Laura Baumesteir nos lleva a preguntarnos acerca de la responsabilidad de una madre para con su hija en unas condiciones de vida infrahumanas.

La hija de todas las rabias también nos lleva a relacionar la película con otras que han descrito igualmente la de niños marginados como Cafarnaun, Slumdog Millionaire o Sorry we missed you.

Araceli A. Medal fue una recién llegada para la directora y su equipo de casting porque habían elegido a otra niña de una escuela de danza , pero la pandemia quiso que María fuera su intérprete, donde logran conseguir de ella algo más que un rostro avenido a la tristeza y miseria. Y pone cara al consejo de si quieres algo tienes que pelear por ello, a quien solo su amigo logra animar y donde verdaderamente ella conocerá el sentido de la lealtad y la amistad.

De nuevo el cine se sirve de estos niños para provocar una denuncia social basada en el abandono de ellos por parte de la sociedad que los utiliza y les evita enseñarles a leer y escribir. Todo un drama en pleno siglo XXI opulento y avanzado donde una parte de la población se dedica a vivir de la basura de este siglo ya que como se transmite, ”la basura no se recoge” y “se quema para poder volver a empezar”.

La película se estrenará en los cines de España el próximo viernes 21 de abril de 2023. Aquí se puede ver el tráiler de la película: