Es imposible no recordar siempre que veo a Pierce Brosnan su interpretación en la serie Remington Steele junto a Stephanie Zimbalist. Aunque a él le fue mucho mejor que a ella, al menos en número de producciones, hacían una pareja estupenda y recuerdo que muchos de los gestos los ha seguido manteniendo el actor irlandés que fue uno de los James Bond más populares.
En Fast Charlie, una película dirigida por el artesano Phillip Noyce, Pierce Brosnan se muestra, muy veterano a sus setenta años, como un mafioso que sabe limpiar la basura para otro mafioso, el último papel en el cine de James Caan, y al que cuida como si fuese su hijo y le ayuda a recordar para que no termine de olvidar. El último trabajo será desenmascarar a un mafioso en nómina del FBI que se carga a toda la banda y cuyo último trabajo de Charlie será la venganza y la retirada a la tranquila Toscana italiana con la bella Morena Baccarin a la que seduce a golpe de limpieza de malvados y asesinos y de buena pasta cocinada.
Los espectadores nos hacemos mayores y sabemos encontrar en Fast Charlie un trabajo de calidad aunque ya no para grandes audiencias y públicos. Es Pierce Brosnan un actor solvente al que no le importa aparecer en calzoncillos y camiseta, cocinar para Morena Baccarin o cuidar con mimo y paciencia a James Caan en una silla de ruedas. Y disparar sin remordimientos y sin preguntar cuando toca hacerlo.
También es una producción hermosa porque al mafioso poco le importa ya su trabajo. Ha sobrevivido a enormes batallas con la pandilla, es muy bonita la escena en la que se presenta a toda la banda mientras asisten al cumpleaños del personaje de James Caan soplando velas que parecen lanzallamas.
Así que Charlie se quiere ir a la Toscana. Venden villas por precios ridículos y se puede empezar una nueva vida a salvo de venganzas, guerras y tensión por el poder.
Y no hay cabezazos con Fast Charlie. Sólo ternura y admiración hacia los mafiosos, de los que nunca terminas de estar seguro si hay traidores entre ellos, y deseo de que al Charlie de Pierce Brosnan le vaya bien con la Marcie de Morena Baccarin en la Italia tranquila, acogedora y bella de la Toscana.
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