‘El cuarto pasajero’ y los finales imposibles de Álex de la Iglesia

‘El cuarto pasajero’ y los finales imposibles de Álex de la Iglesia

Julián está interpretado por Alberto San Juan, está divorciado y se encuentra en el peor momento económico de su vida. Vive con su madre y recurre a una aplicación móvil para compartir su coche con quien necesite viajar a Madrid los fines de semana. Entre los viajeros habituales está Lorena, interpretada por Blanca Suárez, de la que se enamora y a la que le prepara un discurso para atreverse a salir con ella.

Así es el inicio de la película El cuarto pasajero que sigue con dos personas más metiéndose en un coche para ir de Bilbao a Madrid una tarde de domingo cualquiera. Las dos personajes que se incluyen en el coche están interpretados por Rubén Cortada y Ernesto Alterio. El personaje de Alterio es una mezcla de innovador, emprendedor y hortera fracasado. El personaje de Cortada es un hippy actual con guitarra. Y así, sin saber cómo puede avanzar la película los cuatro personajes se mueven en el coche y lo que va pasando no interesa lo más mínimo, hasta un final del que no me acuerdo porque la película me echó hace muchos minutos atrás.

Ernesto Alterio es un personaje exagerado que no sé cómo se concibió en el guion. Parece un emprendedor de poca monta con ideas bárbaras y ejecuciones lamentables. El personaje de Blanca Suárez siente que el de Alberto San Juan quiere acercarse a ella aunque no sólo no lo demuestra sino que en cuanto tiene la oportunidad no duda en mostrarse en ropa interior y con todos los encantos posibles para el personaje de Rubén Cortada.

La película progresa hasta un final con un atasco inmenso en el que los personajes recorren los interiores de los coches aparcados. Aquí sí hay alguna situación cómica porque las relaciones entre las personas, si no hace falta mucho más desarrollo, son fluidas y simpáticas. Mientras tanto la película lleva ya tal caída libre que el número de cabezazos empieza a crecer peligrosamente.

Álex de la Iglesia tiene mucho talento aunque ni el tramo medio de la película ni el final están bien trabajados, es más una suma de situaciones y de combinaciones que quieren provocar el entretenimiento, la sonrisa rápida y la presentación de personajes, bien definidos, aunque sin una historia en la que encajen.

Imagen profundamente desagradable como promoción de la película que no aporta nada y que es todo mentira: el sol, el horizonte, la carretera y el gesto

El cuarto pasajero es una película que pudo haber sido porque empieza estupendamente y crea una expectativa que se cae conforme avanza y que nos echa de la película a base de cabezazos. Para los espectadores que disfruten con un personaje como el que reproduce Ernesto Alterio quizá la película tenga recorrido o para los fans de Blanca Suárez porque la actriz despliega sus recursos, de todo tipo, para ofrecerse en la película. Ni Rubén Cortada, ni Alberto San Juan aportan mucho más porque sus personajes, muy encorsetados, tampoco dan para más en una historia con poco fondo.

Más información | imdb

Sigue la conversación en @elepesypelis

Entrada anterior ‘El día de la bestia’ cuando Álex de la Iglesia pasó del cómic al cine con brillantez
Entrada siguiente ‘Entre pillos anda el juego’ o lo bien que le sienta a Eddie Murphy hacer comedia en compañía

Recent Post

Este sitio web utiliza cookies para que usted tenga la mejor experiencia de usuario. Si continúa navegando está dando su consentimiento para la aceptación de las mencionadas cookies y la aceptación de nuestra política de cookies, pinche el enlace para mayor información. ACEPTAR

Aviso de cookies