‘Doctor Strange en el multiverso de la locura’, a Benedict Cumberbatch le salen canas

Cada vez me gusta menos anticiparme a la hora de hacer una tarea. Prefiero dejar que los sucesos pasen e intentar disfrutarlos mientras ocurre. En el cine es muy sencillo conseguir el efecto. Nada de leer antes, nada de ver Youtube y nada de acceder a la imdb. Así llego sin saber nada de la película y me dejo sorprender por lo que pasa. Además disfruto de las escenas finales y del inicio que siempre, en el universo Marvel, es sorprendente.

Sin embargo en Doctor Strange en el multiverso de la locura es poco más lo que se disfruta en la película. A la mitad de la proyección algún cabezazo se hace notar entre notas musicales, fantasmas y personajes que no aportan mucho y que no merecen tanto desgaste emocional. Las series de televisión pueden generar mucha saturación. Lo mejor de la película es el terror y los momentos de susto que ofrece el director Sam Raimi que enriquecen el multiverso de la locura.

A Sam Raimi le gusta ofrecernos escenas lúgubres, es maravillosa la salida con la mano arriba desde el enterramiento, o las canas del Doctor Strange que le confieren, junto a la capa y los planos cortos ¿de qué color son los ojos del Doctor Strange?, un aire sombrío y tenebroso.

Sin embargo lo que le preocupa al Doctor Strange es ser feliz. Él siempre ha sido reconocido y respetado y su mejor lección, que la vimos en la primera película cada vez que salía del cuerpo con los golpes que le imprimía el maestro, es aprender a respetar a los demás. Y en esta película el Doctor Strange contrasta su visión en el multiverso con todas las Christine Palmer que puede. Y mantiene su amor y devoción por el personaje interpretado por Rachel McAdams.

La más salvaje de la película es Wanda, la bruja escarlata, que tiene una idea muy clara, o no, porque no se entiende nada de la relación con sus hijos. Wanda es muy agresiva utilizando un libro de magia negra contra el que se tiene que emplear el Doctor Strange. Probablemente el enfrentamiento de ultratumba es el más interesante de la película y el que más se disfruta con esa máscara terrorífica.

Y luego está America Chavez, que uno no sabe si quiere ser grande otra vez u homenajear el comunismo. El caso es que su superpoder le permite viajar por el multiverso aunque al estilo del superhéroe americano, sin tener ningún control de lo que hace. Hasta que aprende a resolver sus miedos y temores y corre el riesgo de convertirse en un personaje interesante para el futuro.

En la película, que es de Marvel aunque tiene poco humor, hay escenas, dos, después de los créditos. Una que llama la atención por el personaje femenino incluido y otra que incluye el tono cómico, demasiado tarde, y que nos anima a irnos ya a casa. Nos quedamos con los guiños, con la mirada y con las canas de Benedict Cumberbatch además de con la intensa maldad de Wanda interpretada con devoción y recato por Elizabeth Olsen.

Más información | imdb, abc.es, libertaddigital.com

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