‘Chicas malas’ una comedia musical adolescente muy adecuada para la generación redes sociales

Chicas malas es una película que tiene el claro objetivo de conseguir que nos los pasemos bien con los encuentros y desencuentros entre la chica y el chico adolescentes que están saliendo del bachillerato. La novedad que incluye la película es que lo que le pasa a la pareja, que no incluye momentos románticos variados ni intensos, es insuficiente y hay muchas rupturas y desencuentros adicionales. Por ejemplo con los amigos de acogida, con las amigas de acogida, con la madre, con la profesora, con el director y hasta con la chica que está por el colegio aunque no estudia allí. Todo son acercamientos y alejamientos con mucho sentido del humor aunque con mucha traición y malísimas intenciones. Sin embargo todos terminan ganando y para la generación usuaria de redes sociales éstas están muy bien integradas en las secuencias que buscan acercar y alejar a los protagonistas. Aunque hay que tener cuidado con las barritas porque no todas sirven para alimentarse de forma sana y pueden tener otros efectos.

Jaquel Spivey es uno de los mejores de la película, aunque con tantos personajes se puede empatizar con muchos de ellos. Al menos es difícil hacerlo con el de Avantika, que es Karen Shetty que dice que es imposible hacer un cálculo de regla de tres simple y que siempre se queda mirando sin saber muy bien que pasa a su alrededor. También Auli’i Cravalho como Janis es muy atractiva y tiene mucha vida por descubrir como artista ¡sensacionales sus diseños de maquillaje! Y por supuesto Regina con Reneé Rapp que es muy divertida y que progresa en su maldad aunque al final no es para tanto. Los momentos musicales, que hay muchos y bien integrados, incluyen también coreografías con mucho sentido del humor y mucha mala leche por parte de la guionista.

El guión es de Tina Fey, que también interpreta y tiene mucha comedia dentro. Tira a socialdemócrata e incluye moralina que parece mentira que todavía funcione este contenido tantos años después.

La versión original, a la que Elepés y Pelís acudió invitados por @paramount_spain con el maquillaje adicional, sombra aquí, sombra allá, de @krashkosmetics para ir a tope de rosa, es estupenda y en las canciones encaja mucho mejor.

En la película, y como la pareja protagonista apenas tiene momentos ni románticos ni de desencuentros, quizá el momento más divertido es cuando ella se acerca a él desde la silla de atrás en una escena secuencial, pues los chicos apenas aparecemos y nos vamos quedando diluidos en el cine actual. Además ya no hay buenos ni malos y aquí son todos bastante perversos y retorcidos. Se retrata estupendamente una generación que vive al día, sin remordimientos y que avanza sin mirar atrás mientras está permanentemente conectada a las redes sociales.

De Chicas malas también se puede destacar lo bien que se lo pasan los espectadores. Cada vez que había una pieza cómica las risas me llegaban a la butaca por todos lados del cine. Así que cualquier grupo de amigos y parejas que vayan a verla, y que sean de esa generación, la van a disfrutar. Para la mía la empatía es con los profesores y el director, que se pasa toda la película completamente perdido. Y más con Tina Fey que se lo pasa muy bien como profesora de matemáticas y a la que el comentario del libro de los acabados le genera divertidas situaciones con las que disfruta como buena comediante.

No hay cabezazo posible y se disfruta mucho Chicas malas. Muchas gracias a @paramount_spain y fantástico el maquillaje de @krashkosmetics para ir bien guapos con el rosa.

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