Aprendiendo a dibujar con Fernando Güell en ‘Walt Disney Animation Studios: un siglo de historias’

Aprendiendo a dibujar con Fernando Güell en ‘Walt Disney Animation Studios: un siglo de historias’

El 16 de octubre de 2023 The Walt Disney Company celebró 100 años de historia y para celebrarlo Fernando Güell, que es director de arte, diseñador de personajes y guionista, estuvo en octubre del año 2023 presentando El arte de contar historias a través del diseño de personajes. El evento formó parte del homenaje de Disney a los fans y a los creadores de las historias que han hecho posible la emoción y la magia de Disney durante este último siglo. Disney100 fue una exposición, en colaboración con el Ayuntamiento de Madrid que cedió el espacio en Serrería Belga, para presentar un recorrido por los 100 años de historia de la compañía a través de los carteles e ilustraciones de las películas de Disney Animation y también de charlas, como la de Fernando Güell.

Desde el principio Fernando Güell nos habló de una historia de amor de él con Disney. Desde que su madre le guiase por el dibujo de los cómics y se sentase junto a su mesa de dibujo en la que había dibujos, tinta y cigarros. Fernando nos recordó a Walt Disney con el libro: Maravilla de los dibujos animados que se puede encontrar en Amazon aunque ya no se edita. Fernando explicó que con ocho años escribió a Disney y que, para él, que vivía en un pueblo entre Aragón y Cataluña, fue una sorpresa y una alegría recibir contestación de Mickey Mouse. Y así es la historia de amor que, años después, cuando estaba en Disney, contactó con la persona que respondía las cartas a los fans de todo el mundo.

Así que Fernando empezó a trabajar para la Editorial Bruguera y pronto pudo ir a Disney. Se marchó a vivir a Barcelona y ahí se quedo. Ahora es Director de arte de la revista Disney en el norte de Europa y tiene 40-50 dibujantes que trabajan mes a mes para sacar adelante el proyecto.

Fernando habló de muchos conceptos de dibujo ante una audiencia entusiasmada porque además nos dibujó en directo. Nos habló del espacio negativo y que porqué se trabaja mucho en Disney para evitar que no se choquen las piezas. En general todo es Disney y se nota porque se cultiva y se trabaja para que sea así.

Habló de cómo a las nuevas generaciones les encantan los músculos, los detalles y sin embargo los personajes no tienen carisma ni alma. No sabemos quién es, qué le pasa, está enamorado… Así que su sistemática de trabajo es solicitarles a los alumnos que dibujen un cocinero y que lo expongan en la pared.

Y a partir de ahí construyen: es hombre, es mujer, es mayor, es joven, está alegre, feliz, triste… Y les anima a ir más allá definiendo al personaje: qué le pasa, tiene familia, tiene dinero, es solitario,… y después se vuelve a dibujar construyendo un personaje totalmente diferente porque está construido con una base de emociones y sensaciones. A partir de ahí hay que seguir trabajando para contar una historia y emocionar. Marca de la casa de Disney. Por ejemplo habló del cocinero, del personaje de Ratatouille que deja una primera impresión de, cómo, ratas que cocinan. Y por qué siempre hay que confiar en Pixar que es capaz de hacer una obra maestra.

Para Fernando las caricaturas son muy importantes y permiten construir un personaje. Por ejemplo, Angela Landsbury es la Sra. Potts de Bella y Bestia. A Jeremy Irons le dieron el rey león y a Robin Williams el genio de Alí Babá y los cuarenta ladrones.

Y Fernando se puso a dibujar. Pintó la línea de fuerza y a partir de ahí a Goofy, que es un perro y que pasea a Pluto, ¡¿qué es otro perro?! ¿Acaso no hay inconsistencias en la vida? preguntó Fernando.

En Disney son especialistas en el estudio del carácter de los personajes. Además Fernando nos explicó que su mujer es psicoperateuta gestáltica y que por eso se hizo una rueda de dibujo para descubrir comportamientos y ambientes, una rueda de expresiones que además sorteó y regaló entre los asistentes. Aquí abajo se puede ver a la Elsa de Frozen en múltiples actitudes y más abajo detalles de su rueda de expresiones.

Y Fernando nos fue dando consejos e ideas: que los personajes miren y conecten, que aprendamos el uso de los círculos para dibujar ¡Mickey Mouse está hecho a base de círculos! Y que después del círculo está la esfera, el volumen, el gesto, el personaje. Nos animó a «ser los putos amos» a aportar algo diferente y que conquiste. Además nos exigió ser muy buenos en lo que se hace y que hay trabajo de sobra en la animación. Mencionó a la inteligencia artificial y dijo que no es competencia porque no tiene alma, no es capaz de sufrir, de amar, de construir a base de experiencias, no tiene arte y dijo que sólo es competencia para los mediocres.

Fernando nos transmitió la pasión y dijo que con 30 años calculó que ya llevaba 50.000 horas dibujando y que no sólo era echar horas. Había que encontrar la excelencia para construir contenido propio y encontrar una forma de progresar. Ése es el límite, el talento de la gente. Y nos dejó soñando con Disney, con los dibujos y con las formas de contar historias con personajes animados.

Más información | Serrería Belga

Imagen | Marcos López

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